Amita, me fui antes que tú para prepararte el camino y estar en el sitio, en una nube blanca para recibirte. Estaremos juntas como siempre hemos estado. Te quiero amita, y siempre te he querido. Me conocías tan bien y yo a ti.
Han sido muchos años, pero tú siempre serás joven, por eso te llamas Young, y a mí me pusiste Boo, que era muy fácil de decir y de oír cuando me llamabas si me había escondido.
Ya sé que me cuidaban y me daban de comer cuando te llevaron al hospital, pero supe que había llegado nuestro momento. Yo lo tuve que decidir por mi cuenta, es que la gente se cree que los animales, y más los gatos, no somos listos. Y vaya si lo somos. Ya lo ves, que aquí estoy recibiéndote, dándote mi patita. No te preocupes si no has traído el cepillo, aquí hay de todo y comida muy rica. Y Saltaremos de nube en nube, será muy divertido, te lo dice tu Boo.

Un escrit molt emotiu. M’ha semblat molt sensible que poseu això. Felicitats per aquesta iniciativa.
precioso y emotivo